inclusiontecnologica
Capítulo 5
El miedo del profesor al ordenador

Segunda Consigna:
Lea y analice el apartado completo titulado como “El miedo del profesor al ordenador”. ¿Coincide Usted con las dificultades que eventualmente crea en los docentes el temor al ordenador? ¿Puede citar alguna razón adicional, más próxima a nuestro contexto, por la cual un docente puede experimentar temor o rechazo hacia el uso del ordenador para apoyar la enseñanza? Por otra parte, ¿concuerda Usted con las posibles formas para enfrentar el problema que sugiere el autor en ese mismo apartado y en el siguiente [Estrategias alternativas de apoyo al profesorado]? Si no concuerda, ¿qué otras estrategias sugiere, más propias de nuestra cultura institucional?
Respuesta:
El miedo o el rechazo del profesor al ordenador puede convertirse en un elemento relevante si se plantea el tema solo como una cuestión de formación del profesorado, y esto puede resultar contraproducente, porque tiende a responsabilizar a los profesores y situar el problema centrado en el claustro. Las oportunidades de desarrollo profesional para los instructores son fundamentales, pero no bastan para asegurar el uso de la tecnología para la enseñanza. Es éste un planteamiento erróneo del tema. En realidad, la formación o el desarrollo profesional es la última fase de un proceso de cambio más amplio.
Entonces hay que desarrollar estrategias para abordar cada uno de estos pasos que llevan al cambio. En este sentido coincido con el análisis propuesto por Bates, pero a la hora de plantear la solución, en Argentina, tenemos ventajas comparativas respecto de las universidades estadounidenses o canadienses que nos permiten abordar el proceso de cambio desde otra perspectiva.
En nuestro país está en marcha en Proceso de Acreditación Universitaria a cargo de la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CoNEAU) que se encarga de la evaluación y acreditación de todas las carreras de grado reguladas por el Estado de acuerdo a estándares fijados por el Ministerio de Educación, con el propósito de alcanzar los niveles de calidad en la Educación Superior. Entre los estándares se encuentran los vinculados con la carrera docente, donde el profesor deberá acreditar su idoneidad para estar a cargo de una Cátedra o formar parte de la misma. De manera tal que no es una novedad para el claustro que debe mejorar su currículum vítae no solo en términos de investigación y publicaciones, sino también, en términos de formación profesional docente, donde se incluye el uso de la tecnología para la enseñanza, y esto se implementa, por ejemplo, a partir de carreras de posgrado como la Maestría en Docencia Universitaria.